No haga legados de la vivienda habitual
Si su vivienda habitual tiene un valor importante, evite dejársela a un solo heredero en su testamento. Fiscalmente es mejor que la deje a todos sus herederos y que éstos decidan quién debe adjudicársela…
La vivienda, “para todos”
Legado. Con el fin de evitar discusiones entre sus hijos por cuestiones hereditarias, usted va a otorgar testamento y va a señalar que determinados bienes ya sean adjudicados a unos herederos concretos (en cuyo caso estos bienes tendrán el carácter de legado). ¡Atención! Pues bien, si es posible, evite constituir un legado sobre su vivienda habitual. Si lo hace, el Impuesto sobre Sucesiones total que deberán satisfacer sus herederos será más elevado.
Reducción del 95%. Cuando una persona fallece y su cónyuge, descendientes, ascendientes o parientes colaterales (en este último caso, que hubiesen convivido con ella durante los dos años anteriores al fallecimiento) reciben en herencia su vivienda habitual, tienen derecho a una reducción en el Impuesto sobre Sucesiones del 95% del valor de dicho inmueble, con el límite de 122.606,47 euros (o un importe superior en algunas comunidades autónomas).
Menor ISD. Pues bien, si deja su vivienda habitual a uno de sus herederos en forma de legado, sólo él podrá aplicar esta reducción y el límite indicados. Apunte. En cambio, si no hace distinciones en su testamento (de forma que todos sus herederos la reciban), todos y cada uno de los herederos podrán aplicar la reducción indicada, con el límite, también para cada uno de ellos, de los 122.606,47 euros. De esta forma, el impuesto total a satisfacer por sus herederos será mucho más bajo.
Sin legados. Aunque usted no haga legados, sus hijos no quedarán obligados a quedarse el 50% de cada bien recibido. En el momento de aceptar la herencia p![file0001817248786[1]](https://www.grupomurcia.com/wp-content/uploads/2014/07/file00018172487861.jpg)
ondrán repartirse sus bienes como deseen, y ambos podrán aplicar la reducción por vivienda habitual con independencia de que sólo se la adjudique uno de ellos.
Consejo: acuerde con los hijos quién se quedará con la vivienda habitual, pero evite señalarlo en el testamento.
